ingles-en-infantil

¿Qué entendemos por “iniciar a los niños en el inglés de una manera motivadora”?

La organización para la enseñanza del inglés en infantil y en los colegios en general, continúa siendo todavía hoy objeto de polémica.

A veces no se definen bien los objetivos y se pone toda la atención en la motivación de los niños al aprender la lengua. Y esto está muy bien, pero no nos tenemos que olvidar de definir el porqué aprendemos, es decir, para ser capaces de comunicarnos con fluidez con la misma y de ver el inglés como un idioma para aprender y descubrir.

Tal y como explican en Gencat.cat, muchas veces existen dudas sobre las dificultades metodológicas con que los especialistas se encuentran, la poca concreción o ambigüedad de los objetivos a lograr y, en algunos casos, el dominio insuficiente de la lengua.

No se trata de reducir la lengua a tres o cuatro campos semánticos presentados de “manera entretenida” (juegos, canciones y cuentos). Si la clase se reduce a esto, no percibimos el inglés como una lengua que sirve para comunicarse, como útil y natural, si no como una lengua diferente que sirve para jugar y cantar. Esto es positivo desde un punto de vista motivacional, pero tenemos que reflexionar más en qué y cómo se aprende y definir el objetivo por el cual aprendemos una lengua, es decir, para ser capaces de comunicarnos con fluidez en inglés.

Iniciar a los niños en el inglés de una manera motivadora

Así pues, ¿qué entendemos por “iniciar a los niños en el inglés de una manera motivadora”? “Iniciar” no tendría que ser sinónimo de presentar, repetir, limitar o listar una lengua mediante recursos atractivos. “Iniciar” quiere decir empezar a “hacer vivir” la lengua, empezar a usar la lengua para descubrir, para socializarse, para probar y volver a probar, para expresar sentimientos y experiencias, para ser más autónomo y reflexivo, dándonos cuenta de que la lengua va más allá del aula y sirve para lo mismo que las lenguas que se hablan en casa.

Que el niño espontáneamente produzca la narración de una vivencia es, sin duda, consecuencia de un acercamiento comunicativo y natural, y consecuencia también de la creación, por parte del maestro, de un ambiente que favorece la confianza y la interacción.

No solo hay que conocer al niño y su proceso de adquisición de la lengua. También es necesario conocer la etapa de Educación Infantil para que el inglés se integre en una realidad que pone condiciones, pero que a la vez posibilita infinidad de oportunidades.

El especialista que una o dos veces por semana entra en el aula de Infantil para “impartir una hora” de inglés, se encuentra con las primeras limitaciones de espacio y tiempo que no ayudan en absoluto a respetar el marco holístico de la etapa. Si bien es cierto que el espacio aula ofrece muchas posibilidades de interacción, hay otros espacios, como por ejemplo el patio, el pasillo, el comedor o el lavabo que complementan y refuerzan el aula, especialmente en el trabajo de hábitos y en el juego. Sería ideal disponer de estos espacios también durante el tiempo de inmersión e interacción en lengua inglesa. Las propuestas didácticas tienen que contemplar las variables espacio y tiempo y, a la vez adecuarse a los objetivos y contenidos de ciclo.

ingles-para-ninos

La introducción del inglés en infantil

El especialista, entendido como maestro responsable de proponer, gestionar y dinamizar un contexto de inmersión en una lengua extranjera (inglés) en la etapa de Educación Infantil, tiene que ser sensible a las características de cada uno de los niños y atender sus necesidades. Tiene que ser modelo de lengua, capaz de interaccionar constantemente y aprovechar oportunidades para ampliar y repetir en inglés las producciones orales de los niños, siempre reforzando positivamente su participación.

La introducción de una lengua extranjera en la Educación Infantil es un proyecto de escuela y, como tal, necesita que toda la comunidad educativa juegue su papel. El equipo de gestión tendrá que facilitar la organización de espacio y tiempo más adecuado para asegurar momentos naturales de comunicación. El equipo de tutores y maestros especialistas tendrá que trabajar conjuntamente para diseñar una propuesta didáctica progresiva, significativa, con objetivos claros y contenidos que integren las tres áreas curriculares.

Y los niños serán, como tiene que ser, los protagonistas. Harán saber a los adultos que la lengua inglesa no es solo una lengua diferente que sirve para cantar canciones, sino una lengua también por aprender, por descubrir.

Conoce nuestros cuadernos de inglés Little Hi, para la etapa infantil, un refuerzo tanto para casa como para el colegio, que ayuda a asimilar conceptos de manera natural y fácil:

Little infantil-pack especial